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Puesto #1
Puesto #1 Palabras de Flavio Cianciarullo:La canción nace cuando mi hijo Astor era bebé y Yaco estaba en la panza de la madre, o sea que entonces había una movilización bastante grande con la paternidad. La hice en mi casa y salió muy rápida y naturalmente. Me resultaba muy interesante hacer una letra de amor que no hablara de una señorita, de una dama. El tema central ya estaba, y lo interesante era cómo decirlo. Bajar eso en palabras era un camino sinuoso porque podés caer en clichés cursis, así que era un desafío que en alguna medida me excitaba. A la vez, quería hacer algo muy natural y a mi estilo.Tenía referentes, como en todas mis canciones, y aquí fue una canción de Rubén Blades que se llama "El nacimiento de Ramiro" que está en su disco "Maestra Vida". En cuanto a la música, estaba muy movilizado por encarar algo bajo la rítmica del candombre uruguayo, a nuestro estilo, y filtrado a la manera en que sonábamos en ese momento. Todo eso se metió en la licuadora de ese extraño proceso que es la composición.Sé conscientemente que la letra tiene algo de naïf, y no me parece que esté mal. Tiene un costado tácito: no siempre los hijos son bienvenidos, y a veces nacen en condiciones terribles. A eso me refieron con la frase: "Yo sé que a veces hay desencuentros".Mi intención era que sea universal, una canción de todos. Yo era un compositor que escribía para que otro cante, así que no podía abusar de la primera persona o de dar determinado detalle muuy personal. Si uno lee la canción, puede encajar para cualquiera, pero también era mía. Incluso habíamos hecho un primera versión en demo, algo habitual para que yo la cantara y Gabrial (Vicentico) se familiarizara con la métrica. Y siempre le daba la posibilidad de modificar lo que quisiera, porque es muy jodido darle algo a un cantante y que no lo haga suyo. Pero por suerte apenas puso su voz la hizo suya.Honestamente, "Vos sabés" es una canción que me encanta. A veces me preguntan: "¿A qué hijo se lo hiciste?" Y mis hijos saben que tiene que ver con ellos, y creo que en alguna medida se sienten dueños. Pero no, se lo hice a la paternidad, y es el día de hoy que mucho padres se acercan y me cuentan que se emocionaron cuando estaban esperando un hijo. ¡La letra emociona... y eso me llena gratamente! Fue una e esas canciuones que al tocarla por primera vez parece que no hubiera sido tuya: se ve que alguien puso eso y uno lo baja, pero ya estaba en algún lugar del cosmos.